El Granada B renueva su plantilla con producto nacional. La nueva estructura de cantera espera surtir con asiduidad de jugadores locales al filial a medio plazo
La política de cantera ha virado su ruta esta temporada. El nuevo impulso ha comenzado por el primer filial, un Granada B que ha remodelado su plantilla y acentuado su apuesta por jugadores nacionales. Hasta 20 se han incorporado a un equipo que este año dirige desde el banquillo Pedro Morilla.
Para asentar la nueva filosofía de cantera se precisa paciencia. Por ello el objetivo principal para este curso es consolidar el rumbo con la permanencia en Segunda B. Un año de adaptación para un grupo joven con potencial para crecer. Cinco de ellos ya han hecho aparición este verano en la pretemporada del primer equipo: Aarón Escandell, Rubén Sánchez, David Grande, Fran Serrano y Caio Emerson.
Se espera un crecimiento reposado pero continuado que a medio plazo permita albergar al mayor número de jugadores naturales de Granada y provincia. En esta tarea vuelca sus esfuerzos Luis Fradua, director de Fútbol Formativo desde el pasado julio.
Entre las líneas maestras de cantera destaca la creación de una amplia red de captación de talento granadino y andaluz. Se trabaja en mejorar el filtrado de manera coordinada por criterios únicos compartidos por secretaría técnica y entrenadores. Una formación diseñada por etapas y métodos de entrenamiento; y complementada por el propio desarrollo de las destrezas pedagógicas de los técnicos.
