El ejército che supo que Cesare Prandelli sería su comandante el pasado 1 de octubre. Su debut victorioso ante el Sporting en El Molinón en la jornada 8, con un doblete de Mario Suárez, no hacía presagiar las dificultades que se encontraría posteriormente. Una derrota in extremis en casa frente al Barcelona, un empate en Riazor y otro duelo perdido en Balaidos se traducen en un punto sobre los últimos nueve disputados.
Los soldados valencianistas asustan a sus rivales por nombre y méritos. Los roles están claros. Diego Alves fue llamado a filas para detenerlo todo, incluidas las penas máximas; Garay, Mangala y Mario Suárez, para contener los ataques enemigos por tierra, mar y aire; Dani Parejo, como arquitecto del plan ofensivo; Nani y Rodrigo, que ha anotado dos goles tras la llegada del técnico transalpino, para ejecutarlo. Prandelli tiene hombres, incluso en la reserva, para ganar cualquier batalla, pero LaLiga es una guerra impredecible desde tiempos inmemoriales. En el apartado de bajas destaca la de Fede Cartabia, titular ante el Celta, que sufrió un esguince de rodilla en un entrenamiento que le apartará de los terrenos tres semanas.
Aludir al destino o a los elementos es la única justificación posible para explicar la razón por la que el Granada nunca ha conquistado Mestalla tras realizar varias actuaciones notables. Los nazaríes saben que el Turia es su Rubicón y que pueden cambiar la historia para siempre. Enfrente un che, un Cesare, el condecorado Prandelli.
El entrenador: Cesare Prandelli
El hombre que llevó a la selección italiana a la final de la Euro de 2012 (en la que cayó frente a España por 4-0) fue el elegido para tomar las riendas del Valencia tras el paso de Pako Ayestarán y Voro por el banquillo che. El que fuera mediocentro de la Juventus firmó en la capital del Turia hasta junio de 2018. Otra línea de prestigio en un currículo espectacular, en el que figuran clubes de la talla del Parma, la Fiorentina y la Roma.
La estrella: Dani Parejo
La magia valencianista emana una temporada más de las botas de Parejo. Tras un verano complicado, en el que llegó a estar apartado de su equipo, el de Coslada vuelve a tener el cartel de indiscutible en su sexta campaña en Mestalla. Ha disputado todos los minutos del campeonato liguero y ha anotado dos goles desde el punto de penalti, contra el Alavés ante su público y en Vigo.
Sucedió el… 2 de diciembre de 1973
Aquel domingo el Granada a punto estuvo de conquistar el campo del Valencia, un territorio aciago para los nazaríes. El gol de Porta en el minuto 32 de la segunda parte ponía en ventaja a los rojiblancos en el antiguo Luis Casanova, pero los locales lograban empatar el encuentro tres minutos más tarde para sellar el 1-1 final. Eran los primeros puntos que perdía aquel Valencia como local. Fue la última vez que el cuadro granadinista sacó algo positivo del feudo che.
